Se obtuvo un resultado que muestra que cada semana el porcentaje mínimo de actividades completadas fue del 70%, lo que resulta en una mejora de la productividad y el rendimiento, como lo afirman (De La Torre, Taboada y Picoy 2021). El porcentaje de trabajo en espera para las semanas transcurridas disminuyó, lo que coincide con los resultados de (Liu 2012).

Con las mediciones semanales del trabajo realizado, se logró el porcentaje planificado de finalización, como se muestra en la Figura 9, coincidiendo con lo mencionado por (Xueying et al. 2019). Esto tuvo un impacto positivo en términos económicos, con la finalización del trabajo dentro del plazo establecido para su entrega, no se generaron penalizaciones. Otro aspecto favorable de la aplicación de Lean Construction fue la productividad porque se redujeron los tiempos muertos; además, se contrarrestó la variabilidad en los flujos de valor y se obtuvo un buen desempeño laboral. (Hazim, AbuSalem y Louzi 2019), (Bamfo-Agyei, Aigbavboa y Didibhuku).